Para poder desempeñar el oficio de maestro de primeras letras se requería un certificado de aptitud que era expedido por la autoridad competente tras demostrar el candidato sus conocimientos y superar un examen. A partir de ese momento tenía licencia para abrir escuela pública en cualquier ciudad, villa o lugar.
En muchas localidades -que no en todas- a partir de finales del siglo XV empezaba a valorarse la enseñanza y se destinaba un edificio a escuela de niños.
Los maestros interesados en ejercer como tales, con su título bajo el brazo, concurrían exponiendo sus condiciones para que luego el concejo escogiera entre los candidatos aquél que se ajustara más a las circunstancias de la vecindad.
Mateo Jiménez Delgado, maestro del arte de escribir y enseñar las primeras letras a los niños...., examinado y aprobado por la ciudad y reino de León, en 14 de mayo de 1672, y comprobado por la real Chancillería de Valladolid y el Consejo de Castilla, en 1685 abría escuela en Benavente ...sin particular salario de la villa sino solo lo que le dan y han acostumbrado a dar cada niño...
El arte de maestro de niños es el arte mas real, universal, genérico y necesario que hay ni puede haber en las repúblicas. Los señores Reyes Católicos de España no lo han estancado, antes bien lo han franqueado y concedido gracias, libertades e inmunidades a los que usan y ejercen dicho arte...
Esteban Rebollo, vecino de Alcalá de Henares, presentaba sus credenciales en la villa de Talamanca enterado de que el día de San Juan de junio de 1740 expiraba el contrato que el concejo tenía suscrito con el maestro anterior. He aquí sus peticiones:
Es condición que se me haya de dar casa donde residir y .....para que mi mujer haya de poder tener todas las niñas de los vecinos que quisieren enviarlas a aprender, desde (un) fajero a todo género de costura...cobrando por este trabajo solamente un cuarto (4 maravedís) cada sábado de la semana.
Como salario por su labor docente solicitaba 30 fanegas de trigo bueno..., las 15 de la villa y el restante de los vecinos,...más 200 reales de vellón al año. Un precio que consideraba de justicia por adquirir el compromiso de enseñar a los niños a leer romance, latín y procesos, escribir gordo y delgado, cómo contar y de memoria hasta el libro IV de Gramática...
Asimismo se obligaba a no ausentarse de la escuela por motivo alguno, salvo por enfermedad o viaje inexcusable, en cuyo caso habrá de entender en la escuela uno de mis hijos....
Comentarios
Publicar un comentario