Vamos con la tercera y última entrega -por esta vez- con mi agradecimiento a los gestores y lectores de "Divulgando Omaña". Hemos visto que el conde de Luna de turno percibía una serie de tributos que, dependiendo del concejo y las fechas, variaban en cuanto a la forma y la cantidad: yantar, millar, fumazga, matadera, yuguería, pan del cuarto....... Además de esto cobraba importantes cantidades por foros y otros tipos de arrendamiento de sus propios bienes. Juana Martínez , viuda de Juan Blanco, solicitaba a la autoridad judicial, en 1548 , pruebas documentales que demostrasen que su marido había gozado y llevado las heredades que llaman de realengo en Villabandín y Barrio de la Puente. Un nuevo arrendamiento de estas mismas heredades en diciembre de 1669 era adjudicado por el representante de la casa de Luna a Fabián Rodríguez y a su hijo Domingo, en precio y cuantía de 14 heminas de centeno...
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Mostrando las entradas etiquetadas como HISTORIAS DE OMAÑA
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Diego Fernández de Quiñones, I conde de Luna en 1462 por merced de Enrique IV , disfrutó de las rentas y prebendas de nuestros concejos hasta 1491, año en que le sucede su primogénito Bernardino Fernández de Quiñones, con quien su padre mantuvo serias diferencias que se subsanaron con el segundo matrimonio del heredero. El segundo hijo de Diego Fernández de Quiñones (I conde), Antonio de Quiñones , fundó el mayorazgo de Los Cilleros, embrión del futuro concejo del mismo nombre que, como sabemos, incluía algunos de los pueblos de la Omaña Alta (Vegapujín, Posada de Omaña, Torrecillo y Montrondo) además de parte de Babia, Alto Sil.... Falleció Bernardino (II conde) cuando apenas llevaba un año al frente del estado de Luna, quedando como heredero su hijo Francisco Fernández de Quiñones, menor de edad. Las trifulcas y litigios familiares se sucedieron durante algunos años a causa de las diferencias entre la madre del menor, Isabel Osorio ,...
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Hoy publico mi artículo número 400 - hay que ver cómo pasa el tiempo- y quiero hacerlo compartiendo historias de mi tierra, que también es la de algunos de mis lectores, Omaña. Hagamos un poco de historia: El 28 de julio de 1334 ? Alfonso XI concedió un privilegio a los Concejos de Paredes, Omaña, Travesales y La Lomba de Campestredo . Supongo que se trataba del privilegio del que se hizo un traslado (copia autorizada) en 1380 , mediante el cuál el rey ordenaba que no se cobre a los vecinos de los concejos de Paredes de Omaña, Los Travesales y La Lomba de Campestredo más de 10 maravedís a cada uno de fuero y derechos. Parece ser que reinando en Castilla Enrique II hizo merced a Juan González de Bazán de algunos territorios, entre ellos la tierra de Villamayor ...con su castro de Beñal ( aún no se cita el castillo) . Era en marzo de 1369 y este dato nos confirma que estas tierras eran de realengo hasta el momento de la ...
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El 13 de agosto de 1662 celebraba concejo el vecindario en pleno de Montrondo. Estaba compuesto por Juan García del Río (juez), Alonso de Sabugo y Pedro Rivero (regidores), Pedro García de los Palacios, Domingo García de los Trigos, Pascual Díez, Juan Álvarez de la Calzada, Andrés García, Marcos García, Gabriel Fernández, Domingo García, Juan García del Ablanedo, Pedro Álvarez, Pedro de la Calzada, Pedro de Sabugo, Antonio Álvarez, Antonio Rodríguez, Juan García del Otero, Domingo García de la Calzada, Pedro de Sabugo, Pedro García del Río, Toribio García, Alonso de Vega, Diego García, Juan de Sabugo Valcárcel, Santiago de Sabugo, Estébano Suárez y Antonio Suárez. El tema que congregaba a la concurrencia era la concesión de un poder a los vecinos Marcos García y Domingo García ( dantes y aceptantes ) y al letrado Salvador de Lemos (procurador en la Real Chancillería de Valladolid) para entender en el pleito presentad...
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El monasterio de Santa María de Otero de las Dueñas , cuyas ruinas aún se pueden observar desde la carretera, ejerció no poca influencia en el devenir diario de algunos pueblos de nuestra comarca. Directa o indirectamente muchos omañeses contribuyeron con sus recursos al sostenimiento del convento. En los años finales del siglo XV ( data de las fuentes consultadas para redactar este artículo) no solamente era considerable el patrimonio que poseían sino los derechos que gozaban sobre molinos, montes, arroyos de riego o sobre la pesca de algunos ríos de la comarca.. Por otra parte, nos situamos en los albores del reinado de los RRCC cuando cenobios, conventos, monasterios o abadías gozaban de unos privilegios difícilmente imaginables medio milenio después. Pertenecía el monasterio a la orden del Císter y su gestión dependía, en cierto modo, del de Gradefes puesto que era la abadesa de éste último la que, de vez en cuando...
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En la noche del 23 de febrero de 1815 un incendio devoraba la venta de arriba de Pandorado, en el Concejo de la Lomba. El establecimiento estaba regentado por Pedro Peláez, vecino de La Omañuela y viviente en el despoblado de Nuestra Señora de Pandorado, y su conjunta Clara Álvarez . Pedro Peláez aseguró que el fuego había sido provocado intencionadamente y presentó una querella criminal contra Nicolás Fernández , con quien mantenía algunas diferencias y al que culpaba del delito. Nicolás Fernández, de 39 años poco más o menos, vecino también de La Omañuela, había acudido esa misma tarde a citar a los venteros para que acudiesen con su carro a la facendera del día siguiente para cargar los terrones con los que repararían el puerto del que se servían a la hora de regar las tierras. Pedro no estaba en la casa y Clara le respondió que no pensaba acudir a la cita, siendo apercibida de que si eso ocurría, sería castiga...
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Quiero hoy contar una historia cuyos protagonistas eran omañeses que, como tantos otros, se vieron forzados a integrar las levas que habrían de tomar parte en las operaciones bélicas a las que tan aficionados eran algunos monarcas de siglos pasados. Juan Alonso Pimentel y Vigil de Quiñones, conde de Benavente y Luna allá por los años 80 del siglo XVI, recibió el encargo del rey Felipe II de reclutar en sus estados cierto número de infantes para ir a la guerra. Las autoridades señoriales se encargaban de comunicar el real requerimiento a las autoridades concejiles; éstas hacían un reparto según el censo poblacional y comunicaban a los regidores cuántos soldados debía aportar cada lugar. Reunidos en concejo los vecinos de cada pueblo elegían entre los jóvenes, voluntarios o no, aquellos que reunían las condiciones óptimas. ...Y se les nombró por soldados.... El propio común les adelantaba el diner...
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LOS FERNÁNDEZ DE MARZAN. El 30 de junio de 1548, los licenciados Juan Manuel y Atienza y el doctor Arvico, Alcaldes de Hijosdalgo y Notario del Reino de León en Valladolid, redactaban una sentencia a favor de Juan, Pedro y Fernando Fernández (hermanos) y Alonso Fernández (primo de los anteriores), vecinos de Marzán, mediante la cuál se reconocía la hidalguía de esta familia y se condenaba al concejo de Omaña a restituir a los susodichos los bienes que les habían sido prendados. El hecho de pertenecer a la nobleza suponía, en la práctica, estar exentos de ciertas contribuciones y cargas tanto reales como concejiles. Por otra parte, los nobles o hijosdalgo tenían el "honor" de ser los primeros en acudir a la guerra en defensa del señor del territorio (o de sus adeptos) cuando eran requeridos. Para gozar de este status era esencial la limpieza de sangre de varias generaciones de antepasados así como...
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APUNTES DE ALIMENTACIÓN. siglo XVIII Los precios de los alimentos, incluidos los de primera necesidad como el trigo y el centeno, experimentaron importantes fluctuaciones en nuestra comarca a lo largo de todo el siglo XVIII. La abundancia o escasez de cosecha en una economía de supervivencia, asentada exclusivamente sobre el pilar de la labranza, se traducía en bonanza y vitalidad o en hambruna, enfermedad y miseria . Así de simple y de trágico a la vez. Evidentemente, la repercusión social del alza de precios de un producto de consumo necesario (cereales, carne....) no era la misma que si lo que se encarecía era un artículo de consumo suntuario (chocolate, bizcochos...). En 1765 Carlos III eliminaba la llamada tasa de granos (precio máximo autorizado para la venta del cereal). Esta medida consistía en fomentar el libre comercio con la finalidad de que poco a poco se fueran modernizando las explotaciones agrarias, haciéndolas así más...