El 8 de mayo de 1521 llegaba al muelle de Sevilla una nao nombrada San Antonio, la mayor de las cinco que fueron, en agosto de 1519, al descubrimiento  de la especiería con  Fernando de Magallanes al frente de la  expedición.

Venía Jerónimo Guerra  como capitán de la nao y como piloto  Esteban Gómez, portugués.
Este último estaba empleado  -antes de iniciar el periplo con Magallanes-   en la Casa de la Contratación  al servicio de la corona española, cobrando anualmente 30.000 maravedíes? de salario.

En la San Antonio venían otras 53 personas entre sobresalientes y marinos y traían preso a Álvaro de la Mezquita, primo carnal de Magallanes.

Al parecer, cuando la expedición llegó a las costas de la Patagonia, las desventuras  sufridas para encontrar el paso hacia las islas de las especias hicieron mella en la tripulación y se produjo un motín que acabó de manera trágica al ordenar, Magallanes, la ejecución de los capitanes que abanderaron la revuelta.

La nao San Antonio iba, en el viaje de ida,   al mano del capitán  Juan  de Cartagena, uno de los acusados  de dirigir el motín. Tras el suceso referido, éste  fue reemplazado en la capitanía por    Alvaro de la Mezquita.

¿Qué había ocurrido para que llegase a España, en extrañas circunstancias,  una sola nave de las cinco que habían partido de Sanlucar de Barrameda en agosto de 1519?
Las autoridades de la Casa de la Contratación, en presencia del licenciado Castroverde, letrado de esta Casa, tomaron  declaración a los tripulantes y  ....todos juntamente y cada uno por sí nos informaron y dijeron que su venida y vuelta al puerto de esta ciudad había sido porque el dicho Magallanes había desterrado en una tierra mal aventurada, sin gentes, que es a los 49º?,  al dicho Juan de Cartagena con un capellán. Y había hecho matar a puñaladas a Juan de Mendoza, tesorero de la dicha armada  y después de muerto le hizo descuartizar dándole por traidor, a manera de justicia. Y a Gaspar de Quesada, capitán de una de las dichas cinco naos, le había hecho degollar y descuartizar pregonándolo por traidor. Y  a Andrés de Sanmartín y Hernando de Morales, pilotos, les hizo dar tratos de cuerda hasta hacerles perder los miembros..

 Magallanes amenazaba con la prisión a todo aquél que no  obedeciera  con todo rigor sus órdenes. No admitía consejos. Los demás capitanes no compartían su criterio....¿A qué fin se hizo la dicha armada....si no en descubrimiento de la especiería?...

Criticaban la obstinación de su jefe ...por cuanto no llevaban camino... iban y seguían la costa del Brasil adelante por tierra fría e inútil y sin ningún provecho, gastando los bastimentos y perdiendo el tiempo porque había ya 14 meses menos 6 días que partieron desde Sanlucar......

Así las cosas,  Magallanes les envió ( a los tripulantes de la  nao San Antonio) a descubrir un golfo y les ordenó que volvieran al cuarto día a donde él quedaba. Y volvieron al tercer día y no le hallaron, de donde acordaron de se volver a España....

Practicadas las primeras  diligencias en Sevilla, se envió información  puntualmente del suceso al rey Carlos I: ...A Álvaro de la Mezquita lo mandamos poner preso en la cárcel del almirante......Y a Jerónimo Guerra y Esteban Gómez ....mandamos carcelar dentro, en esta Casa de la Contratación, en un palacio cerrado con pleito homenaje y caución juratoria de no enajenar de ella, so cierta pena, donde estarán hasta que Vuestra Majestad  nos envíe a mandar lo que fuere servido hagamos en ello.








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