MÉTODOS CURATIVOS

Decían los galenos de siglos anteriores al actual y al pasado, que todo cuerpo humano se compone de cuatro humores, a saber: flema, sangre, melancolía y cólera, asociados cada uno de ellos a otros tantos elementos: frío, humedad, sequedad y calor respectivamente. Las alteraciones que pueda sufrir uno de los humores compromete a los demás, dando lugar a las enfermedades.  Para combatirlas, desde que el mundo es mundo, el hombre ha buscado remedios en la naturaleza y ha  dejado constancia de sus observaciones.  Se conservan, desde antiguo,  diversos tratados manuscritos que recogen los principios  terapéuticos aplicados a los enfermos. Veamos algunos ejemplos transcritos de una copia manuscrita de la obra "Botica General de Remedios Experimentados" que data  de 1797.

De los animales...han aprendido los hombres lo más de la medicina. Así, si te hallas malo de los ojos, ejecuta lo que la golondrina, que no es ni más ni menos que extraer el zumo de la celidonia, hinojo o ruda y untar la vista con ello. Otra opción también muy efectiva sería lavar los ojos con agua de sardinas bien colada. También se puede fabricar un colirio con vino blanco donde se hayan disuelto polvos de clavo fino bien molido.

En caso de dolor de oídos es conveniente llenarlos de orines propios calientes, que comen la horrura, causa del dolor. La sordera parece que se cura si se jeringan los oídos con vino blanco hervido con ajenjo. 

El dolor de muelas desaparece si se masca cebolla cruda o se coloca sobre la muela que duele un ajo asado muy caliente. Por lo visto es también muy efectivo llevar en la boca, a modo de caramelo, un colmillo de un hombre o de un perro negro.

Si un paciente sufre letargo o delirio, darle con ortigas en las espaldas,  pantorrillas, morcillos de los brazos y en la frente; y polvos de mostaza bien molida a las narices...que volverá en sí.

Erisipela: salpicar la cara con sangre  reciente de gallina negra y poner al cuello un palo de retama. 

Para los dolores cólicos nada mejor que una sangría en el menguante de mayo. 

Muy buenas propiedades tiene  el vino tinto cocido con hojas y flor de romero, que procuran múltiples beneficios: limpian el estómago, purifican la sangre, desopilan, quitan el temblor de las manos. Y la gota, lepra y sarna, lavándose con él. Aplicado este vino en el rostro le pone hermoso y se conserva sin arrugas....

Disolviendo en una redoma dos libras de azúcar en agua, bebe una jícara mezclada con  la misma cantidad de aguardiente.  Esta medicina alegra el corazón, desopila el bazo, conforta el estómago y la cabeza, da fuerzas a todas las partes del cuerpo..., causa sueño templado y alegra. Y preserva de perlesía.

Para la memoria, mostaza molida y pasada por  tamiz y tomada como tabaco........, comprenderás más en una hora que otros que no sepan este remedio en un día...

Quien quiera hacer la prueba....