VIDA  Y COSTUMBRES (con algún apunte de Micología) - MÉXICO-  (finales SIGLO XVI)

El historiador indígena Domingo de San Antón Muñoz, alias Chimalpahin (1579-1660?) escribió una crónica repleta de datos, que tituló "Conquista de México y otros reinos y provincias de la Nueva España". Dedicó la obra al teniente coronel de Dragones Provinciales de Puebla de los Ángeles, D. Baltasar Ceneselli. Una transcripción del texto original data de 1766 y se conserva en la Biblioteca  Nacional de Francia. Veamos cómo describía la fisonomía y costumbres de los nativos:

....Son de mediana estatura... ,leonados en color, ojos grandes, frentes anchas, narices muy  abiertas, cabellos gordos negros...Algunos blancos hay y se tiene por maravilla. Se pintan muy feos para la guerra y las celebraciones, y se adornan con plumas, escamas  y pieles de tigre. Hácense grandes agujeros en las orejas y narices y barbilla, en que ponen piedras, oro y huesos, o picos de águilas, o colmillos de animales,  o espinas de peces.....Los de Pánuco ......toman muchas mujeres por matrimonio y muchas sin él; las pueden dejar, pero con causa. Son celosísimos y así las aporrean mucho....Dánse mucho a la carnalidad, así con los hombres como con las mujeres...Las mujeres llevan el cabello largo, pélanse y úntanse todas para no tener pelo sino en la cabeza y cejas......Presumen de largas tetas y así dan leche a sus hijos por las espaldas....

Viven muchos en la misma casa. Labran piezas de pedernal verdinegro, cuentan con hachas, barrenas y escoplos fabricados con mezcla de  metales. Hacen navajas de azabache y de otras muy duras piedras.

Comen poca carne, no rechazan la de cerdo pero sí la de carnero y cabrón porque les hiede. A veces se comen sus mismos piojos porque creen ser mas limpio comerlos que matarlos. No hacen vino de uvas, la bebida mas común se elabora con harina de cacao y agua, a la que, a veces, añaden miel; esta bebida no contiene alcohol y es muy refrescante. En partos, bodas y fiestas quieren bebida que los desatine, y entonces mezclan yerbas que con su zumo y olor pestífero, los encalabrina y desatina mas que cualquier vino...y no se les puede sufrir el hedor que por esto les sale de la boca y lo valientes que se vuelven.

Cuando se quieren embriagar de veras comen unas setillas que llaman teonanacatl o carne de Dios y con el amargor beben mucha aguamiel.....y quedan fuera de sentido, por lo que ven mil animales que los tragan. Y los espantan. Les parece que se comen vivos de gusanos y como rabiosos buscan quien los mate.....Como, además de aficionada a la Historia, también lo soy a la Micología, reconozco la sorpresa que me ha causado   este último apunte.  Podemos afirmar que las propiedades alucinógenas del género  Psilocybe  ya eran conocidas por los indígenas de México, al menos, desde el siglo XVI; y que consumían estas setas en ocasiones especiales, a sabiendas de que, incluso, podían llevarles a la muerte.